-"Me han dicho que mi kintipo es X especie, de X color, X altura, y tiene pareja en el astral (yo no lo se/no tengo certeza de ello)"
-"Me han dicho que me desdoblé y me encontré con fulanito e hicimos grandes cosas (pero yo no me acuerdo)".
-"Me han dicho que tuve X vida con X forma y que fue así y asao".
-"Me han dicho que mi kintipo es malo/que tiene X características (yo no tengo ni idea)"
-"Me han dicho que estoy destinado a grandes cosas".
Estas son tan sólo algunas de las cosas que he oido por ahí o me han contado algunos Parientes.
Cuando la frase empieza por "Me han dicho", ya me hecho las manos a la cabeza. O bueno, no tiene por qué empezar así... pero si acaba parecido como con un "Ah yo no lo se, me lo han dicho", mal vamos.
Empecemos por el hecho de que este es un camino interno, personal. Normalmente se anda en solitario (lo cual a veces puede resultar muy duro) y en el cual las verdaderas respuestas vendrán de tu interior. De tu corazón. A lo mejor alguna vez puede interpretarse mal, porque pasa por el "filtro cerebral/racional humano" y a veces interpretamos las cosas como nos da la gana. Tenemos "el canal sucio".
Pero indudablemente las VERDADERAS vienen del interior de la persona.
¿Alguien externo puede saber cosas de nosotros o nuestro kintipo? Sí, puede ser. Raras veces pero puede ser. Hay personas que pueden 'oler' la firma energética de la persona y cosas similares. Pero lo que verá también pasará por su "filtro". Muy probablemente lo explicará desde su entendimiento, y quizás termine haciendo más mal que bien tan sólo por "saciar" la curiosidad de una persona crédula, o por colmar su propio ego. Quien sabe. Quiero creer que la mayoría de las veces no se hace con mala intención, pero definitivamente normalmente no hace mucho bien (si la persona receptora es influenciable/crédula).
A las personas que buscan cosncientemente que les digan "cosas" sobre si mismos, opiniones, sobre su ser, su kintipo, hay que recordarles que deben desarrolllar su fuerza interna y su discernimiento. Que alguien te diga algo no significa que sea verdad o que tengas que creerlo automatica y totalmente (porque a lo mejor tiene medias verdades... o no tiene nada de cierto) como una verdad propia, salida de ti. No hay que absorver absolutamente todo lo que otra persona diga que ve o siente sobre uno. Aun siendo una persona de confianza.
Consideralo, sí, por que no. Pero no lo creas todo. Por muy atractivo que sea, por mucho que te guste... o que te traumatice, ¡para! Piensa, siente. ¿Consideras responsable y justo para contigo no hacer "tu trabajo"? Porque tu trabajo consiste en escucharte a ti mismo, investigar en tu interior, y mirar con criterio al exterior. Hay que fortalecer la autoestima también. ¿Por qué va a ser más cierto lo que diga alguien que lo que tú estés sintiendo? ¿Por qué tú no puedes meditar y hacer introspección y vale más lo que otro diga? Eso es un poco de vago.... *Risa* Es más "facil" que otro me diga y creérmelo sin más.
Deja de buscar tanto fuera de ti, y mira hacia dentro YA.
A quienes ofrecen información "con buena intención", recordarles que hay jóvenes (y a veces no tan jóvenes) que buscan a qué aferrarse, alguien a quien seguir, que les diga lo que quieren oir, vivir aventuras (de las que casualmente luego no recuerdan nada), que les hagan el trabajo. Ingénuos, crédulos, moldeables e influenciables. Gente en proceso de desarrollo. Vulnerables. Dependientes.
No está mal ofrecer lo que uno siente con respecto a las cosas, pero siempre aclarando estos puntos y sin ninguna maldad: "Es lo que yo siento, el modo en que yo lo interpreto pero a fin de cuentas tienes que trabajar en ti mismo. Mirar en tu interior y buscar y encontrar quién eres. No te lo voy a dar hecho. Las verdaderas respuestas de cada uno, vienen del interior de uno mismo". No lo ofrezcas como "La verdad" porque puede serla, puede no serla. Repito, es lo que tú has captado pero es la persona en cuestión quien definitivamente tiene que mirarse y conocerse, no tú a ella o en base a lo que le estás diciendo. No le cuentes historias por favor. No le condiciones según "tu verdad".
Deja que la otra persona crezca, aunque se enfade y le duela que no le satisfagas su curiosidad... porque al final, le estás haciendo un bien "quitándole las rueditas de soporte de la bicicleta".
Deja que se desarrolle y fortalezca. Apóyale, oriéntale, pero se responsable con lo que haces.
A quienes ofrecen información "con no buenas intenciones, creyendo la propia mentira o con dobles intenciones egoistas", no tengo palabras...
Os aprovecháis de una persona tan sólo para sentiros importantes, que os admiran, que os buscan. O hasta por "historias personales" de todo tipo que al final no es más que por conveniencia propia o a saber qué más.
Creáis una relación de dependencia entre esa persona y vosotros. La vampirizáis. No la dejáis crecer, ser independiente y cear propio-responsabilidad. No dejáis que desarrolle la seguridad en si mismo, tan sólo lo queréis detrás como perrito faldero. Manipulándole, saboteándole.
Increible el nivel de egoismo... e irresponsabilidad.
No ahondaré más en esto.
Resumiendo, el pilar principal es la joven personita ingenua, influenciable y un pelín vaga. Y no lo digo para ofender a nadie, lo he visto así.
Cuando la persona trabaje en si misma, escuche primero a su corazón, trabaje en su autoestima y desarrolle su criterio, estos "problemas" desaparecen. Porque entonces escuchará atenta lo que otro pueda decirle, lo considerará, quizás simplemente como algo curioso pero no lo creerá absolutamente todo, fascinado, ni buscará "que le cuenten" para enajenarse aún más en cosas que no sabe realmente si son ciertas (porque no las ha experimentado/vivido/visto/sentido, vienen de fuente externa). Tendrá más peso lo que siente, cree y descubre que lo que otro pueda decirle. Analizará bien las historias que se le puedan contar.
Y así, fin del "problema".
Maduración, responsabilidad, crecimiento interno.
Relatador, no condiciones a tu fiel oyente. Se responsable, se un buen guía.
Oyente, trabaja más en tu interior. Escucha pero no te dejes condicionar. No pequéis de ingenuos. Sed responsables y honestos... con vosotros mismos
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